Brother > Embajador

Es un honor recibirlo

Embajador Brother era un programa de incentivos para distribuidores que inicialmente no había obtenido los resultados deseados. Brother quería relanzarlo y darle mayor notoriedad entre sus dealers. Para ello, nos encargó dotarlo de una identidad visual y pensar en un envío de marketing directo con un obsequio simpático.

La propuesta de NCA fue crear un logotipo de aire aristocrático y darle al envío el aspecto de una comunicación diplomática “oficial”. La elección de la tipografía, los colores y el tono eran idóneos y el envío incluía un divertido bigote adhesivo, el complemento perfecto para ser todo un Embajador.

programa incentivos
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¿Marketing directo? ¡Creatividad a domicilio!

La buena acogida de este primer envío animó a Brother a remitir nuevos mailings a sus distribuidores, al inicio y fin de cada nueva edición. Y en NCA nos pusimos varias premisas indispensables: 1º, sorprender; todos los obsequios debían ser curiosos y muy poco habituales (por favor, nada del típico bolígrafo o la pelota de playa!) 2º, divertir; cada envío debía despertar una sonrisa en los Embajadores y derrochar imaginación y sentido del humor; 3º, complicidad, mucha complicidad: crear un sentimiento de comunidad y hacerles sentir especiales y orgullosos de ser Embajadores Brother; y 4… ajustarnos al presupuesto, siempre modesto: nada de palos de golf, freidoras de aire ni patinetes eléctricos. Algo baratito, pero que mole, ¿eh? 

Desde la investigación al packaging

Así que, dos o tres veces al año, nos poníamos busca-que-te-busca para dar con el merchandising más original y asequible (en Alibaba nos adoran) y darle ese “toque NCA” que lo volvía irresistible. Desde entonces, los Embajadores han recibido regalos de lo más variopinto, desde lingotes llenos de bombones o palos-selfie hasta cervezas artesanas, pasta italiana, calcetines únicos (con diseño exclusivo Embajador), tarros de piruletas o un set para barbacoas con dos simpáticos delantales.  

El Programa se ha convertido en un éxito. El número de Embajadores Brother se ha duplicado, pasando de unos 200 a más de 400, y sigue plenamente vigente y en forma en la actualidad. Lo que demuestra que el marketing directo, bien hecho, sigue siendo un arma muy poderosa. 

En la comunicación interna vale todo, menos aburrir